Yo venía aquí para hablar de mi libro (II): Horneado y presentación final

La semana pasada les conté cómo aderezar un manuscrito para publicarlo en Amazon. Hoy terminaremos la receta hablando de cómo obtener un ISBN y publicar el libro.

Obtención del ISBN (3%)

El ISBN es el DNI del libro: permite identificarlo de forma única, ayuda a comercializarlo y da lugar al alta de la obra en una base de datos nacional de publicaciones. Quien quiera profundizar más en los misterios del ISBN, puede hacerlo consultando este manual.

Mi proyecto no necesitaba realmente un código ISBN ya que Amazon dispone de su propio sistema de codificación (ASIN) pero decidí solicitarlo, en parte por curiosidad, en parte porque quería probar un proceso de edición lo más completo posible. Al principio me llevé una grata sorpresa: puede solicitarse a través de una página WEB siguiendo cuatro pasos:

1. Cumplimentar un formulario de solicitud y subir una copia escaneada del DNI, si el solicitante es una persona física, o el NIF, si se trata de una sociedad
2. Pagar por tarjeta de crédito o PayPal 45 euros, si se solicita por vía normal, y 90 euros, si se hace por vía urgente
3. Después de tres días (uno en caso de tramitación urgente) cumplimentar el formulario de datos de la obra, al que se accede a mediante un correo electrónico
4. Después de tres días (uno en caso de tramitación urgente) se recibe un nuevo e-mail con un enlace, bien a un certificado .pdf con la información de la obra y el número de ISBN , bien al formulario de datos, para rectificar los errores que se indican

Como ven ustedes ven este trámite es innecesariamente complejo y lento: ¿por qué no pueden llevarse a cabo simultáneamente los pasos 1-3?

En mi caso, además, se produjeron algunas incidencias: La primera vez que llegué al paso 4, me encontré con que la solicitud había sido rechazada porque la Agencia entendió erróneamente que no estaba registrando un libro, sino un blog. Un amable operador telefónico me indicó que lo aclarara en un campo de “Comentarios” y volviera a enviar la solicitud.

No acabaron allí los problemas: el formulario WEB que hay que cumplimentar en el paso 3 es claro y preciso para libros físicos, pero no para libros electrónicos. Por ejemplo, pregunta por el número de páginas, las medidas de cada ejemplar o la tirada prevista. En mi caso, las respuestas correctas hubieran sido: “depende,” “vaya usted a saber” e “infinitos ejemplares.”

Esta mala adaptación me obligó a rectificar varias veces la solicitud. Las correcciones consistieron en cosas como marcar “1” en el campo “número de páginas” (¿¿??) o especificar el formato (.prc) y tamaño del fichero (0,6 Mb) en un campo destinado a “describir la obra.” Seguí las indicaciones y finalmente obtuve un ISBN. Agradezco al personal de la agencia su amabilidad e interés pero el proceso, en su conjunto, me pareció caro, innecesariamente lento y poco eficaz.

Publicación (2%)

Una vez aliñado el manuscrito y con el ISBN en su sitio, toca publicarlo. Para ello, basta con entrar en la WEB de Amazon Kindle Publishing y crear una cuenta, lo cual se reduce a identificarte con tu ID de cliente de Amazon (o conseguir uno, si no eras aún cliente), proporcionar tu dirección postal y elegir una opción  - transferencia o cheque -  para el pago de royalties. A continuación hay que cumplimentar dos formularios sencillos: uno relacionado con la obra en sí, otro sobre la gestión de sus derechos y precios.

En el formulario relacionado con la obra hay que especificar el título, la edición, proporcionar un resumen, clasificarlo en una categoría (como novela, ensayo,…) y especificar si se quiere proteger el ejemplar con un sistema anticopia (DRM) o no. En mi caso, la opción fue un claro y contundente NO.

Desde esta misma página se puede subir la portada del libro y el manuscrito. El proceso es simple y rápido: se buscan los ficheros en el disco, se eligen y en unos segundos termina la carga de datos. Al fin y al cabo un ebook típico sólo ocupa entre 0,5 y 1 megabyte. Una vez que el libro ha subido, puedes asegurarte de que se ha cargado correctamente previsualizándolo.

El formulario sobre precios y royalties permite definir en qué zonas geográficas se autoriza la venta, el precio del libro  - eliges el precio en dólares y te ofrece por defecto los correspondientes precios en moneda local -  y el porcentaje de royalties que deseas cobrar. En principio, se puede escoger entre un 35% ó un 70%. Hay algunas limitaciones a las combinaciones de precio-porcentaje de royalties que se pueden escoger. Ninguna me pareció poco razonable.

Una vez cumplimentados los dos formularios y subido el manuscrito, llega el momento de pulsar el “botón nuclear.” Haces “clic” y ya está: es la madre de todos los anticlímax.

Aparece un mensaje avisándote de que se inicia un proceso de revisión del manuscrito. Al cabo de un rato (menos de dos horas en mi caso) el status cambia, indicando que comienza el proceso de publicación en sí. Se anuncia un plazo de 12 horas para obras en inglés y 48 horas, si están en otros idiomas. En mi caso tardé unas 12 horas hasta recibir un e-mail confirmando que el libro estaba publicado, aunque a las tres horas ya podía acceder a él a través de su número ASIN.

Si desean más detalles sobre este proceso, pueden ver este vídeo explicativo.

Muchos conocidos me preguntan si ha sido difícil publicar este libro. Mi respuesta es: “Hoy es más fácil publicar un ebook y venderlo de aquí a Australia, que hacer lo mismo con un libro en papel y venderlo de aquí a Tragacete.” Y punto.

Pues esto es lo que quería contarles hoy. En un próximo post quiero explicarles los medios he utilizado para apoyar su comercialización y los próximos pasos que quiero dar en este peculiar experimento, que incluyen cosas como ponerlo a la venta en otras librerías electrónicas y publicar un par de minilibros especializados.

¡El trabajo se acumula! El tiempo en internet corre muy deprisa…